Cuando el líquido peritoneal se convierte en ascitis en pacientes con hepatitis

Cuando el líquido peritoneal se convierte en ascitis en pacientes con hepatitis

El líquido peritoneal es un fluido lubricante normal que se encuentra en la cavidad peritoneal: el espacio entre las capas de tejido que recubren la pared del vientre y los órganos abdominales (como el hígado y el bazo , vesícula biliar y estómago). El líquido es principalmente agua con electrolitos, anticuerpos, glóbulos blancos y otros productos bioquímicos.

¿Cuál es el propósito del líquido peritoneal?

La función principal del líquido peritoneal es reducir la fricción entre los órganos abdominales a medida que se mueven durante la digestión.

En una persona sana, normalmente hay una pequeña cantidad de líquido peritoneal presente en la cavidad peritoneal. Sin embargo, algunos problemas en el cuerpo pueden provocar que se acumule un exceso de líquido en la cavidad. Este líquido se llama líquido ascítico y conduce a la ascitis, una de las complicaciones de la cirrosis.

¿Cómo se desarrolla Ascites?

La ascitis es más común en pacientes que tienen enfermedades que afectan al hígado. El daño al hígado puede causar presión arterial alta en las venas que administran sangre al hígado, una condición conocida como hipertensión portal. Sin embargo, muchos otros trastornos también pueden causar ascitis, como cáncer, insuficiencia cardíaca, insuficiencia renal, inflamación del páncreas (pancreatitis) y tuberculosis que afectan el revestimiento del abdomen.

Síntomas de ascitis

Cuando la afección es leve, es posible que no haya síntomas visibles. Sin embargo, cuando hay cantidades moderadas de líquido en el abdomen, una persona puede notar que su tamaño de la cintura ha aumentado y que él o ella puede haber aumentado de peso.

Las cantidades más grandes causan aún más síntomas, incluida la hinchazón del abdomen y la incomodidad. En estos pacientes, el abdomen puede sentirse apretado y estirado, como en un embarazo, y el ombligo puede comenzar a sobresalir.

Cuando la ascitis alcanza un nivel avanzado, la hinchazón en el abdomen ejerce presión sobre el estómago, lo que puede conducir a la pérdida de apetito, así como a los pulmones, lo que puede provocar dificultad para respirar.

Algunos pacientes notan hinchazón en otras áreas del cuerpo también, como los tobillos.

Una complicación de la ascitis, la peritonitis bacteriana, es una infección que puede causar malestar y sensibilidad abdominal, así como fiebre y malestar general. La confusión, la desorientación y la somnolencia pueden desarrollarse y, si no se trata, esta afección puede ser fatal.

Diagnosticar ascitis

Por lo general, un historial y examen físico realizado por su médico será suficiente para levantar sospechas de ascitis. Para confirmar el diagnóstico, se puede ordenar una ecografía o una tomografía computarizada. Y una pequeña muestra de líquido ascítico se puede analizar retirándola a través de una aguja insertada en la pared del abdomen. Este procedimiento se llama paracentesis de diagnóstico.

Tratamiento de ascitis

El tratamiento de la ascitis comienza con una dieta baja en sodio y reposo en cama. Cuando esas estrategias no son suficientes, un médico puede prescribir el uso de diuréticos para ayudar a los riñones a excretar más sodio y agua en la orina.

Para los pacientes que experimentan incomodidad significativa o aquellos que no pueden respirar o comer sin dificultad, el líquido se puede eliminar a través de un procedimiento llamado paracentese terapéutico, en el que se inserta una aguja en el abdomen. En casos raros, se realiza una cirugía para redirigir el flujo sanguíneo usando un shunt y, en los casos más raros, es necesario un trasplante de hígado.

Понравилась статья? Поделить с друзьями: